La costa atlántica de Canadá se preparaba el viernes por la noche para el impacto del huracán Fiona, descrito como una tormenta "histórica" por el servicio meteorológico del país, tras su devastador paso por el Caribe.
El lugar que ocupará en los libros de historia lo tendremos que determinar después, pero sin duda será un acontecimiento histórico y extremo para el este de Canadá", declaró el viernes en una conferencia de prensa Bob Robichaud, meteorólogo del Centro Canadiense de Huracanes (CHC), que calificó a Fiona de huracán "importante".
En su último boletín, el CHC dice que "se espera que esta tormenta sea un evento meteorológico severo para el Canadá Atlántico y el este de Quebec.
Con vientos sostenidos de hasta 195 km/h, el huracán se situaba a las 00:00 GMT a poco más de 200 km al sur de la isla de Sable, una pequeña franja de arena frente a la costa de Nueva Escocia, y se desplazaba hacia el norte a 56 km/h, según el CHC.
Fiona se convertirá en una tormenta post-tropical muy intensa cuando toque tierra sobre el este de Nueva Escocia esta noche o en la madrugada del sábado", escribió el CHC, que sigue pronosticando "lluvias muy intensas y vientos fuertes" y "grandes olas".
Las autoridades de la provincia de Nueva Escocia, la más oriental del país, han emitido una advertencia de corte de electricidad, instando a todo el mundo a permanecer en el interior y a llevar provisiones suficientes para al menos 72 horas.
En la vecina Isla del Príncipe Eduardo, los residentes también se preparaban para la llegada del huracán.
En una conferencia de prensa, el Primer Ministro Justin Trudeau pidió a todos que "tomen las debidas precauciones".
A primera hora del viernes, las Bermudas habían sido azotadas por ráfagas de 160 km/h y fuertes lluvias. Pero después de causar estragos en el Caribe, Fiona pasó a unas 100 millas (160 km) del territorio británico en el Océano Atlántico medio, sin víctimas ni daños importantes.
El proveedor de electricidad Belco informó de que 15.000 de los 36.000 hogares seguían sin electricidad el viernes por la tarde.
El territorio, situado a unos 1.000 kilómetros de Estados Unidos y acostumbrado a los huracanes, es uno de los lugares más aislados del mundo, lo que hace casi imposible la evacuación en caso de emergencia.
Por lo tanto, la isla principal se ha tomado en serio los preparativos. Los edificios y las casas también deben cumplir una estricta normativa de construcción para resistir las tormentas.
Fiona causó la muerte de cuatro personas en Puerto Rico, territorio estadounidense, según un funcionario citado por los medios de comunicación. Se notificó una muerte en Guadalupe (Francia) y dos en la República Dominicana.