El Rey, de 75 años, llegó con Camilla a la clínica londinense el viernes por la mañana, donde también está hospitalizada Kate, la esposa del príncipe heredero Guillermo, que fue sometida a una operación abdominal la semana pasada. Poco después de la operación de Carlos, la Reina dijo a la gente dentro de la clínica el viernes por la tarde que Carlos estaba "evolucionando bien", según informaron los medios británicos. No se especificó cuándo sería dado de alta.
Camilla le visitó el sábado al mediodíadurante unas tres horas. El Palacio anunció la semana pasada que se le había diagnosticado un agrandamiento de la próstata, con el fin de fomentar la detección de esta afección, muy común en los hombres mayores y que, por lo general, no reviste gravedad.
El Palacio insistió en el carácter rutinario de este procedimiento, que afecta "a miles de hombres cada año". Carlos III, que sucedió a Isabel II en septiembre de 2022, canceló la semana pasada varios compromisos públicos para guardar reposo. Tras su operación, deberá someterse a un "breve periodo" de convalecencia, cuya duración no se ha precisado.
La princesa Kate, de 42 años, está hospitalizada en la London Clinic desde el 16 de enero. No se ha revelado la enfermedad que padece. Los servicios de la pareja real han asegurado que su operación abdominal fue "un éxito" y han pedido que se respete su intimidad, solicitando que "su información médica personal permanezca confidencial". La única información filtrada por la monarquía es que no se trata de cáncer.
El 17 de enero, el personal de la pareja real indicó que tendría que permanecer hospitalizada entre diez y catorce días. Es poco probable que reanude sus actividades públicas antes de finales de marzo. El príncipe Guillermo ha cancelado varios compromisos públicos mientras ella se recupera de la operación.