Un narcotraficante mexicano, considerado uno de los principales sospechosos de la desaparición de 43 estudiantes en el sur del país en 2014, ha sido detenido de nuevo tras haber sido liberado en 2019, anunciaron este viernes las autoridades.
«Gildardo López Astudillo ha sido puesto bajo custodia» por “delincuencia”, dijo a la prensa una fuente de seguridad federal cercana al caso bajo condición de anonimato.
El narcotraficante fue trasladado a la prisión de alta seguridad del Altiplano, en el Estado de México, cerca de la capital.
Fue capturado por primera vez en 2015 como parte de la investigación sobre la desaparición de los estudiantes, y luego liberado en 2019 después de que un juez dictaminara que las pruebas en su contra se habían obtenido ilegalmente.
López Astudillo, apodado El Gil, está acusado de ser el líder del cártel «Guerreros Unidos», que opera en el estado de Guerrero, en el sur de México.
En este estado desaparecieron 43 jóvenes la noche del 26 al 27 de septiembre de 2014 tras viajar a la ciudad de Iguala para apoderarse de autobuses y llegar a la capital para participar en una manifestación.
Según las investigaciones realizadas bajo la presidencia de Enrique Peña Nieto (2012-2018), policías corruptos entregaron a los estudiantes al cártel Guerreros Unidos, que los confundió con una banda rival y los asesinó, antes de incinerar sus cuerpos.
La detención del narcotraficante se produce en vísperas de una serie de manifestaciones en memoria de los estudiantes de Ayotzinapa con motivo del décimo aniversario de su desaparición.